14/11/2013 (El Pueblo en Línea) - La pianista de Puigcerdà, en la provincia de Girona, se enfrenta a siete años y medio de prisión por contaminación acústica y también por lesiones psíquicas a una vecina.
Ella ha asegurado que la vecina denunciante lo hizo de forma reiterada porque simplemente se había "obsesionado" con ella. Además, la pianista ha negado haber ensayado a todas horas entre los años 2003 y 2007.
También ha revelado que siempre buscó minimizar los ruidos que ocasionaba, y por eso insonorizó tanto la habitación como el piano y aparte se fue de su casa en varias ocasiones para ensayar en otros locales que ella mismo buscó.
La vecina, Sonia Bossoms, alega sufrir a causa del sonido del piano una alteración del sueño, nerviosismo, intranquilidad, desasosiego, ansiedad, episodios de pánico e, incluso, problemas de gestación en los últimos meses del embarazo de su segundo hijo, nacido en 2006. La denunciante, que también estuvo de baja laboral por este asunto, se fue a vivir a Galicia con toda su familia en enero de 2008 al no soportar más el ruido y, según el letrado de la acusación particular, tiene tanta fobia a los pianos que es incapaz de ver uno incluso en una escena de películas de cine.